UN GOBIERNO EN EL AIRE
Esquerra y el PSC no descartan reeditar el tripartito, pero sólo después
de las generales para evitar que la marca «ERC» pase factura a Zapatero
Informe de Inmaculada G. Molina en “La Razón” del 24.09.06
Por su interés y relevancia he seleccionado el informe que sigue para incluirlo en este sitio web.
Madrid- Las elecciones catalanas
supondrán el pistoletazo de salida de un intenso calendario electoral de algo
más de un año que culminará en la convocatoria de las generales. Precisamente,
esta última cita con las urnas determinará, sin duda, las alianzas para la
formación del Gobierno en Cataluña, asegura a LA RAZÓN un insigne dirigente
socialista. Hasta tal extremo será así que el color político del Ejecutivo
catalán «estará en el aire hasta después de las generales».
Aunque ninguna de las fuerzas en liza habla en público de alianzas
postelectorales, en privado van «peu a peu» perfilando un mercado electoral
donde «todo el pescado está prácticamente vendido de antemano», destacan fuentes
del PSC. «Casi con toda seguridad se reproducirán, escaño arriba, escaño abajo,
los resultados de 2003. Por tanto, la constitución del Ejecutivo dependerá de
las matemáticas».
De hecho, el PSC, ERC e IC-V ya han decidido, en caso de necesidad, reeditar
el tripartito. Eso sí, el único requisito impuesto por los socialistas es la
renovación de caras y, más concretamente, la de Carod-Rovira. Condición que
Esquerra «ha aceptado del mil amores». Los socialistas catalanes y los
republicanos han analizado hasta el último detalle del tablero postelectoral.
Incluso están dispuestos a posponer hasta después de las generales la reedición
del tripartito para evitar que la marca «ERC» pase una elevada factura a José
Luis Rodríguez Zapatero en el resto de España.
Adelanto electoral
En este escenario, la formación del Ejecutivo será meramente un problema
aritmético. Si el tripartito suma los 68 escaños en los que se sitúa la mayoría
absoluta en el Parlament, José Montilla será investido presidente con los votos
de sus socios y gobernará en solitario con acuerdos puntales. Montilla soportará
este débil gobierno hasta la reválida de Zapatero, prevista, en principio, para
marzo de 2008, aunque fuentes gubernamentales no descartan que se adelanten las
generales a julio u octubre de 2007. Por tanto, el PSC gobernaría en soledad tan
sólo unos meses, ya que todas las fuerzas catalanas enfrentadas dan por sentado
que habrá Ejecutivo en funciones hasta después de la Navidad. No obstante, el
tripartito tampoco descarta, si cuenta con los 68 escaños, dejar que Artur Mas
sea proclamado presidente con los votos favorables del PP-C. Y llegado el
momento presentar una moción de censura, que arrebataría a CiU la Presidencia de
la Generalitat.
Pese a que la dirección de Esquerra aún no lo ha sometido a votación,
destacados dirigentes de la formación se oponen con contundencia a gobernar con
CiU. «Esta alianza supondría pan para hoy y hambre para mañana. Serían cuatro
años en el Ejecutivo y 24 en la oposición. CiU nos fulminaría de la escena
política catalana», advierten.
Lo que ya no parece tan claro es que Montilla no pueda gobernar con los
convergentes. De hecho, en la calle Nicaragua, cuartel general de los
socialistas catalanes en Barcelona, no se descarta un gabinete de coalición con
la federación nacionalista. Este Ejecutivo cuenta con los parabienes de La
Moncloa y del presidente del Gobierno. Incluso Artur Mas, presidente de CiU, ha
reconocido que ha abordado, en varias ocasiones, esta cuestión con el propio
Zapatero.