ENTREVISTA A JOSEP PIQUÉ, PRESIDENTE DEL PARTIDO POPULAR DE CATALUÑA,

 

 Por Inmaculada G. de Molina en “La Razón” del 12.06.05,

 

 

 Por su interés y relevancia, he seleccionado la entrevista que sigue para incluirla en este sitio web. (L. B.-B.)

 

 

«En público nadie lo dice, pero en privado todos asumen que probablemente no habrá Estatut»

 

 

 

Madrid- –¿Cómo valora la cumbre del Estatut celebrada ayer?

 

–Ha sido una reunión en la que se han constatado las grandes discrepancias políticas. Ha sido fructífera en cuanto a trabajo. Pero se han registrado pocos avances de relevancia política. Se habían generado excesivas

expectativas sobre este encuentro.

Transmitir que estamos cerca de un acuerdo es un error.

 

–¿La vía catalana ha fracasado ya?

 

–La política se ha instalado en el reino de lo políticamente correcto. Quien se atreve a disentir es tachado

de anticatalán. Hay un divorcio entre lo que se expresa en privado y lo que se dice en público. En privado

hoy todo el mundo asume que es muy probable que no haya Estatut.

Ya ha empezado la carrera para ver quién es el responsable. Mientras, en público se dice que lo habrá.

 

–Montilla y Piqué coinciden en que habrá financiación, pero sin Estatut.

 

–Montilla se ha dejado, de alguna manera, seducir por el creciente nacionalismo de Maragall. Ahora comienza a estar inquieto porque el mensaje del Gobierno y de su partido se aleja de su electorado. Nos encontraremos seguro si se mueve en el marco constitucional y asume que se debe salvaguardar las competencias de cada Administración, sin alterar la naturaleza del estado autonómico.

 

–Montilla y Piqué comparten también que al tripartito se le ha ido de las manos el Estatut.

 

–Montilla tiene una creciente preocupación por algunas de las cosas que se deducen del borrador de Estatut.

No es razonable que desde el Estatut se intenten delimitar las competencias exclusivas del Estado... Hay

que admitir que está fuera de lo razonable. Hablamos de un Estatut con 300 artículos. Es un disparate.

 

–¿Entonces?

 

–Si alguien quiere cambiar la Constitución, lo tiene que hacer de cara. Ir a las Cortes y plantearlo. El PP lo tiene claro. Buena parte del PSOE también. Y tengo dudas de que Maragall y Zapatero lo tengan tan claro.

 

–¿Qué opina de la intención de todas las fuerzas, a escepción del PP, de reconocer Cataluña como nación

en el Estatut sin tocar la Constitución española?

 

–Es una contradicción flagrante, si dice algo es contradictorio con el artículo dos de la Constitución.

 

–¿No habrá Estatut por el veto de CiU o por el bloqueo de PSC y PP?

 

–Determinadas fuerzas pretenden alterar el espíritu del 78 con la reforma del Estatut. En el tripartito hay fuerzas con una visión confederal del Estado español. En el PSC hay sectores nacionalistas cercanos a la misma.

 

–¿Cómo valora el debate interno de CiU sobre el coste electoral de apoyar o no la reforma?

 

–Es deprimente.

 

–¿Aún no se ha recuperado tras perder el Gobierno, como prueba que no descarte alianzas con nadie?

 

–Está en una fase de desconcierto. Se ha dado cuenta de que Zapatero prefiere como socios estables a ERC

y a IU. Hasta ahora ha sido ninguneada, pese a su actitud de entrega.

 

–¿Habrá adelanto electoral en Cataluña si no hay Estatut?

 

–Si fracasa la reforma, sólo se puede dar un cierto sentido a la legislatura si se desgaja la financiación del Estatut y se aborda la de la sanidad. El tripartito intentará salvar su balance por esta vía. Debería ser objeto de consenso y debate entre todos, sabiendo que hay que abordarlo entre todas las autonomías, no sólo en  Cataluña.

 

–¿Está preparado para ese anticipo?

 

–Sí. Además, no es descartable. Si se anticipan en Cataluña y en España, habrá que forzar la maquinaria.

 

–¿Habrá fusión de UDC con el PP?

 

–No lo veo. Su discurso es muy nacionalista. Además, no sabemos cuál es su auténtica fuerza electoral.

 

–¿Qué opina del manifiesto firmado por quince intelectuales contra el catalanismo del PSC?

 

–Es lógico. El comportamiento de Maragall es propio de un nacionalista. No compartimos su ideología, pero

si su preocupación.

 

–¿Es asumible la propuesta de financiación autonómica de Solbes?

 

–Se trata de configurar, y en eso podríamos ponernos de acuerdo, espacios fiscales propios para que cada

Administración se financie con sus impuestos. Es posible hacerlo si se participa en el IRPF e Impuestos Especiales. Hay margen para negociar.

 

–¿Y la propuesta de Matas?

 

–No cuestiona el sistema, a diferencia de la del tripartito, que lo pone patas arriba. Es inviable. Si se quieren más servicios, se tendrá que asumir el coste político de plantear más impuestos.

 

–¿Habrá acuerdo sobre sanidad en la Conferencia de Presidentes?

 

–Es un organismo inoperante para discutir cuestiones. Si se vuelve a plantear como la primera, el resultado

será absolutamente nulo.

 

–¿La solución para la sanidad pasa por destinar los ingresos del Impuesto del Tabaco a financiarla?

 

–No tiene soluciones simples, como las que suele plantear el nacionalismo catalán. Pero, si no cortamos la

sangría anual, será pan para hoy y...

 

–¿El PP apoyará las reformas del Senado y de la Constitución, dado el divorcio entre sus direcciones nacional

y regionales?

 

–Niego la mayor. No hay divorcio. Por tanto, no habrá el menor problema, si la voluntad del PSOE es buscar

consensos, como en Valencia.

 

–Por cierto, ¿qué le parece que una autonomía del PP haya sido la primera en aprobar su Estatuto?

 

–Es una muestra de que se pueden llegar a pactos entre las dos fuerzas.

 

–¿Camps podría sustituir a Rajoy?

 

–Nadie está pensando en eso. Rajoy es el mejor candidato. Y Camps una figura de primera magnitud.

 

–¿Rajoy sobrevivirá a las gallegas?

 

–Nadie va a responsabilizarle de algo tan difícil como lograr por quinta vez una mayoría absoluta.

 

–¿Rajoy hará cambios en el PP?

 

–No tengo ni idea.

 

Las opiniones de Fraga.

 

 –¿Cuándo Fraga habla sobre los gays y las mujeres lo hace en nombre del partido?

 

–Es sabido que Fraga siempre ha tenido opiniones personales.

 

–¿Por qué Zapatero no puede dialogar con ETA y Aznar sí?

 

–Sin iniciar ninguna negociación, se rompieron los contactos. Ahora hay una oferta a una banda que sigue poniendo bombas. El Gobierno ha dinamitado el pacto anti ETA. Por tanto, ETA volverá a tener actitudes

chulescas, como las de Otegi. Eso en la etapa anterior no habría sucedido.

 

–Zapatero dice que Rajoy está informado de todos los pasos que da.

 

–Si sabe lo mismo que Rajoy, es aún más irresponsable de lo que pensaba.

 

–¿Y si acaba con ETA?

 

–Algún día se acabará y será por el esfuerzo de todos los gobiernos democráticos. Si coincide con el de Zapatero, le daremos la bienvenida. Pero tengo enormes dudas...

 

–¿Zapatero hace lo mismo de lo que acusaba a Aznar, no escuchar a la gente que sale a la calle?

 

–Demuestra actitudes de endiosamiento y ensordecimiento.

 

–Acusa al PP de usar a las víctimas.

 

–Es una obscenidad política.

 

–¿El futuro de Piqué está en Madrid arropando a Rajoy?

 

–Le arropo en todo lo que puedo. Me presentaré a las catalanas.

 

–¿Y luego?

 

–No se sabe. Igual soy president.