LA BANCA EUROPEA SE JUEGA MÁS DE
600.000 MILLONES EN ESPAÑA
Informe de Alicia González - Madrid en “El
País” del 14 de junio de 2010
Por su interés y relevancia he seleccionado el informe que sigue para
incluirlo en este sitio web.
Las entidades de Francia y Alemania
son las que más dinero han prestado
INFORME TRIMESTRAL DEL BANCO INTERNACIONAL DE PAGOS
El nerviosismo de los mercados ante las dificultades
por las que atraviesa la economía española resulta comprensible. La exposición
de la banca de la eurozona a España ronda los 602.000 millones de euros. Entre
Irlanda, Portugal y Grecia, las entidades de la eurozona se juegan 705.000
millones, lo que prueba el enorme riesgo concentrado sólo con España. Esos son
los datos del informe trimestral sobre banca y mercados financieros
que el Banco Internacional de Pagos (BIS, por sus siglas en inglés)
hizo público ayer.
Esos
602.000 millones son los préstamos de los bancos de la eurozona para España
tanto para el sector público como para el privado empresarial y financiero.
Esta sería la factura que estaría en juego en el caso de España sufriera serios
problemas de solvencia. Por eso, a los países de la eurozona no les interesa
que España caiga y presionan para que se adopten medidas con rapidez para
tranquilizar a los mercados.
Los
bancos franceses son los que tienen una mayor exposición a España con 205.000
millones, seguidos de los alemanes, con 167.000 millones. A diferencia de lo
que sucede con Irlanda, Grecia o Portugal, también tienen una destacada
exposición los bancos de Estados Unidos, por una cuantía que ronda los 140.000
millones, por encima de la exposición de la banca británica (115.000 millones).
En sentido contrario, las entidades españolas tienen concentrada su mayor
exposición en Portugal, con 110.000 millones y casi dos tercios de ellos, en el
sector privado no financiero.
Dentro
de España, los países del euro tampoco han dirigido sus fondos a los mismos
sectores. Así, la banca francesa ha apostado principalmente por el sector
privado empresarial (80.000 millones de dólares) mientras que casi la mitad de
la exposición de la banca alemana se concentra en el sector bancario (unos
90.000 millones).
La
semana pasada el mercado interbancario (donde se prestan los bancos entre sí)
vivieron momentos de máxima tensión por la desconfianza de todos sobre todos,
aunque en mayor medida con las entidades españolas, que se tradujo en el corte
radical del crédito. El BIS explica que han sido las dificultades derivadas del
riesgo soberano en esos países las que se han trasladado a los mercados
monetarios y de ahí el evidente frenazo del crédito interbancario y de la
escasez de financiación en dólares. De hecho, el informe apunta que ante las
dudas de solvencia que plantea el sistema financiero europeo, sus homólogos
estadounidenses estarían reacios a prestarles dinero. Pero no sólo los estadounidenses.
La banca ha reducido su exposición en todos los países desarrollados pero sobre
todo a la zona euro, en 257.000 millones entre octubre y diciembre de 2009.
Aunque
las tensiones financieras que han afectado a Irlanda, Grecia, Portugal y España
tienen su origen en las dificultades el sector público, apenas supone el 16% de
los créditos. El grueso de la exposición se concentra en la banca y las
empresas.
El
BIS insiste en que la integración de los mercados de deuda europeos tras la
puesta en marcha de la moneda única "se ha traducido en una mayor
diversificación del riesgo en la zona euro". Sin embargo, la exposición a
los mencionados países que han sufrido presiones financieras se concentra en un
62% en la región, lo que aumenta las posibilidades de contagio en caso de que
alguno de esos países afronte problemas de solvencia, como así ha sucedido.
El
BIS agrupa a los principales bancos centrales del mundo y está dirigido por el
ex gobernador del Banco de España, Jaime Caruana.
Este organismo asegura que la conexión entre los problemas derivados del fuerte
endeudamiento público y la baja perspectiva de crecimiento de las economías se traducirá en un retraso en la subida de los tipos de interés
de los bancos centrales "más allá" del próximo año. En Estados
Unidos, el BIS no contempla el aumento del precio del dinero hasta marzo de
2011.