INDIGNADOS POR UN ESTADO SIN LEY
Editorial de “El Imparcial” del 16 de junio de 2011
Por su interés y relevancia he
seleccionado el editorial que sigue para incluirlo en este sitio web
De un tiempo a esta parte, la imagen que está dando España al exterior no puede ser más negativa. Más allá de los desaguisados en materia económica perpetrados desde Moncloa, las escenas de antisistema campando a sus anchas por los lugares públicos más representativos de nuestra geografía han dado la vuelta al mundo. Cierto es que muchas de sus reivindicaciones iniciales tenían justificación y algunas hasta sentido; y cierto es también que entre los campistas había numerosas personas con buena intención que creían de verdad en lo que hacían. Pero eso ha dejado paso ahora a conductas mafiosas y totalitarias, cuyo único fin es subvertir la legalidad vigente y socavar los fundamentos mismos del estado de derecho.
Lo sucedido ayer a las puertas del parlamento autonómico catalán con los diputados llegando en helicóptero y furgones policiales, debido a la actitud violenta y hostil de los antisistema de 15-M, es absolutamente inadmisible, amen de estar tipificado como delito. Un intento de secuestro del Parlamento y un atentado contra la inviolabilidad sagrada de los diputados, ¡precisamente en el aniversario de las primeras elecciones de esta democracia! Tampoco era legal la acampada de Sol, ni las movilizaciones ante el Congreso la semana pasada. Se ha llegado al extremo de que pueden violarse las leyes impunemente, a sabiendas de que no habrá consecuencias. Y al Presidente del Gobierno “no le importa”, como él mismo manifestaba ayer. Ocurre que la inacción gubernamental implica el fracaso del Estado, y causa indignación entre quienes sí cumplen la ley, que son la inmensa mayoría