DE FERRAZ A GÉNOVA
Artículo de Marcello en “Republica.com”
del 24 de mayo de 2011
Por su interés y relevancia he
seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.
No puede ser que pasen tantas cosas y que al final no pase
nada y todo se quede como está. Se hunde el PSOE y sale Zapatero
con cara de circunstancias en Ferraz, le echa las culpas a la crisis económica,
no dimite de nada, añade que no habrá elecciones generales anticipadas y luego
acude a la sede de su partido donde nadie le exige con vehemencia que se vaya y
anuncia que se mantiene el calendario de las primarias como si nada hubiera
ocurrido en España y en el PSOE.
De Ferraz a Génova por los bulevares de Sagasta
apenas hay unos cuantos pasos. Allí los gaviotas del PP aclaman al líder y a sus barones asomados al
balcón de la victoria donde tampoco se escucha un discurso político, sino un
rosario de agradecimientos a los votantes y la intendencia del partido.
Gallardón pasado de euforia estuvo a punto de saltar al vacío, la condesa de
Bombay no paraba de bailar y Rajoy -sin doña Elvira- callado con un muerto
ganador.
Y venga a dar las gracias y a echarse flores los unos
a los otros cuando los españoles esperaban algo, y los mercados escudriñaban
gestos, y Botín y los poderosos caballeros de don dinero, la tercera Cámara de
la partidocracia nacional, se enviaban SMS ante la estulticia de Rajoy y
después de haber votado todos ellos y a la desesperada a Zapatero con el
argumento, nada despreciable, de que aún le queda por hacer mucho ‘trabajo
sucio’ para desmontar lo que queda del Estado del bienestar.
O sea Zapatero no se va porque tiene que lograr la
medalla de la paz con ETA para llevarse algo en su despedida del poder, y
porque está empeñado en colocar como sucesora a la ‘gallina caponata’
-así la llaman en los cuarteles- a la Chacón, al pérfido Rubalcaba, o al
mismísimo Pepe Bono, el ‘out sider’
de la carrera. Convencido ZP de que todavía les queda un último cartucho en las
elecciones de 2012 si lo de ETA sale bien, si Francia
y Alemania
consiguen tirar un poco del crecimiento español, y si los acampados de la
Puerta del Sol y el ascenso de UPyD de Rosa
Díez logran desactivar un el impulso del PP.
Zapatero está en lo suyo,
Rubalcaba se lo piensa y Rajoy no tiene prisa. El domingo tardó en aparecer en
el balcón para dar las gracias y no decir nada, siguiendo el consejo de
Arriola: ‘tu, Mariano, detrás de vallao,
callao’. Y eso de callar al de Pontevedra se le da fenomenal, es lo suyo. Y
calla y se deja aclamar por los eufóricos que se toman un chocolate con churros
al pie del balcón, y que agitan banderas españolas mientras corean consignas en
contra de los acampados de la Puerta del Sol.
A Rajoy le ha salido un grano
en Asturias que se llama Paco Cascos y que dejará pudrir hasta el final del día
‘D’ para la formación de gobiernos sin abrir el pico, mientras recibe un sinfín
de felicitaciones de los ricos que adulaban a Zapatero, mientras ante sus
narices empiezan a desfilar algunos de los que pretenden un ministerio como el
nuevo banquero Rato, el del balcón de Carabaña con Pedro J. y Aznar, que ayer
se asomó a Génova por si las moscas y a ver que cae si el de Pontevedra le
ofrece la vicepresidencia económica -con la que ya sueña de Guindos-, porque
don Rodrigo lo del agujero negro de Caja
Madrid y Bancaja le empieza a cansar y no ve
en el horizonte fondos inversores que se quieran hacer cargo de la situación.
Lo mas
que ha dicho Rajoy es que cree que “el gobierno del PSOE no está en
condiciones”, pero no quiso decir eso de “elecciones ya”, sino mas bien y para
sus adentros lo de “Virgencita que me quede como estoy”. Además aun no ha
terminado las clases de ingles y le convendrían unos
meses mas al frente de la
oposición para reflexionar sobre lo ocurrido y lo que puede pasar.
Y mientras tanto la prima de
riesgo de España pasando la cota de los 250 puntos básicos, con la misma
facilidad que los otros cerditos del club de los ‘pigs’
donde ya están a la sopa boba de la UE, Grecia, Irlanda y Portugal. O sea, lo
de las elecciones regionales y municipales es una señal, un aviso, un cambio de
colores en provincias, pero poco más.Y la pelota está
en el tejado del PSOE, mientras el PP se auto felicita en el balcón de Génova y
Rajoy le pide a sus electos mucho trabajo y mucha austeridad, aquí incluido el
inefable Paco Camps.