UN VARAPALO PARA EL ESTATUTO Y UNA ADVERTENCIA PARA ZAPATERO
Editorial de “El Mundo” del 09.10.05
Por su interés y relevancia, he seleccionado el editorial que sigue para incluirlo en este sitio web. (L. B.-B.)
Ante la enorme trascendencia que la reforma del Estatuto catalán tiene para el futuro de España, este periódico ha creído necesario conocer la opinión de los ciudadanos. La primera parte de la encuesta de Sigma 2 que hoy publicamos no deja lugar a dudas: una rotunda mayoría de los españoles, ya sean hombres o mujeres, mayores o jóvenes, votantes del PP o del PSOE, rechaza el texto remitido por el Parlamento catalán a las Cortes. La oposición alcanza el 57,2%, y en el caso de los simpatizantes del PP se dispara por encima del 86%.
Los ciudadanos son perfectamente conscientes del riesgo que entraña el Estatut tanto para el modelo de Estado pactado hace 25 años como para la unidad de España. Aunque están dispuestos a debatir el texto en las Cortes, no aceptan que una comunidad imponga a las demás un cambio de modelo. Así, un contundente 68,7% rechaza la denominación de Cataluña como «nación». Cifra que en el caso de los votantes del PSOE es menor -59,9%-, pero igual de significativa.Y es que, como señala el ministro Bono en la entrevista que hoy publicamos, «para la mayoría de los españoles, constitucional y afectivamente, sólo hay una nación que es España». El rechazo también es mayoritario a la atribución a la Generalitat de competencias que son hoy exclusivas del Estado. Y todavía más abrumador en lo referente a la financiación. Los ciudadanos coinciden en esto con Felipe González, que ha advertido que «con las cosas de comer no se juega». De ninguna manera consideran aceptable que sea la Generalitat quien recaude y gestione todos los impuestos, para luego devolver al Estado una determinada cantidad.
Conjuntamente, estos datos son una clara advertencia al Gobierno de cara al proceso de enmiendas del Estatuto en el Congreso.Muy importante en este sentido, y preocupante para el Ejecutivo, es que una clara mayoría de los ciudadanos -también de los votantes del PSOE- considera que se ha equivocado al estimular la reforma del Estatuto catalán. Preguntados concretamente por la actuación de Zapatero, el 45,5% considera que ha sido irresponsable, frente al 33% que la ve bien.
El presidente del Gobierno tiene, por tanto, un serio problema.Ayer, Rajoy le pedía que mostrara «un poco de patriotismo y responsabilidad» y rectificara, porque el Estatuto «no es un texto que admita tres o cuatro correciones, ni 50». El líder del PP lleva razón.Porque no bastará con un simple «maquillaje» para que la mayoría social lo acepte. El Estatut tendrá que ser recortado de forma drástica, para lo cual los socialistas deben buscar el apoyo de los populares, como de hecho exigen la mayoría de los ciudadanos, incluidos -y esto es muy significativo- los simpatizantes del PSOE. El sondeo de Sigma 2 puede leerse, por tanto, también como un llamamiento a recuperar el espíritu de la Transición, según el cual toda modificación del modelo de Estado debe hacerse con el consenso de los dos grandes partidos nacionales. Claro que al pactar con el PP, el Gobierno podría perder el apoyo de ERC e incluso del PSC, con lo cual se vería abocado a convocar unas elecciones anticipadas. Esta posibilidad no se debe descartar, como tampoco la alternativa que insinúa Bono de que Zapatero, haciendo uso de sus «poderes constitucionales», se adelante a los acontecimientos y disuelva las Cortes.