EL PSOE FIJA SU ESTRATEGIA DE PACTOS SEGÚN LA DISTANCIA SOBRE EL PP
Informe de “El Semanal Digital” del 03.02.08
Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que sigue para incluirlo en este sitio web.
La
alianza con ERC e IU ha tenido un coste de imagen para Zapatero por la
radicalidad que ha impreso a la legislatura, y se teme que eso le pase factura,
lo que verían como "un aviso".
La Ejecutiva Federal del PSOE cree
que ninguna encuesta vaticina que pueda perder las elecciones y por lo tanto no
se ha planteado ni siquiera esa posibilidad, pero sí admite al menos tres
escenarios en los que ganando los comicios podría perder escaños o reducir las
actuales diferencias con el PP, cifradas hoy en 17 actas en el Congreso.
Miembros de la dirección socialista consultados por Elsemanaldigital.com señalan
que los pactos postelectorales dependerían, en ese caso, de tres escenarios
diferentes y con ellos también de tres socios distintos para un futuro Gobierno.
Tras el primer debate electoral mantenido con Eduardo Zaplana, el portavoz del
Grupo Socialista en el Congreso, Diego López Garrido, comentó a los periodistas
que "ninguna encuesta da vencedor al PP en el 9-M y cuanto más acerquen éstas a
los dos partidos, mejor será nuestro resultado". Se refería así al denominado
"voto oculto", que los socialistas creen que se movilizará si en la campaña
electoral los sondeos reflejan que los dos grandes partidos están muy igualados.
No obstante, en medios de la Ejecutiva socialista se asegura que varios miembros
de la dirección ya se han planteado los diferentes escenarios que pueden
presentarse tras el 9-M. El primero de ellos es la victoria con una diferencia
por los actuales 17 escaños o más con respecto al PP. Con ella, creen que se
revalidaría el liderazgo de Zapatero e incluso el actual pacto de Gobierno con
Izquierda Unida en el Congreso y en Andalucía –los socialistas mantienen con sus
votos a Rosa Aguilar (IU) en la alcaldía de
Córdoba- así como en distintos municipios del resto de
España. También se consolidarían los acuerdos con la ERC de Josep Lluís
Carod-Rovira tanto en
Madrid como en la Generalitat o el Ayuntamiento de
Barcelona.
A partir de ahí, comenzarían los denominados "escenarios inconvenientes", según
la expresión irónica de un influyente cargo socialista. Según esta versión, una
victoria del PSOE sobre el PP que redujera la actual distancia hasta los "ocho o
diez escaños" sería interpretada por los socialistas como un "mandato de las
urnas" en las que éstas piden a los socialistas que gobiernen, pero con otros
socios. En esta hipótesis, la mayoría de la Ejecutiva se inclina por entenderse
con CiU y PNV en Madrid,
Cataluña y País Vasco, regresando así a los escenarios
clásicos de los Gobiernos de Felipe González. En estas circunstancias, Zapatero
se vería obligado a entregar el Gobierno de la Generalitat a Artur Mas (CiU) y
cambiar las alianzas también en Barcelona, con la posibilidad incluso de que el
honorable Josep Montilla regresara a Madrid como ministro, aunque el PSC
compartiría poder con los nacionalistas. Estos mismos acuerdos y repartos de
poder intentarían emularse en el País Vasco. Las alianzas andaluzas las dejaría
Zapatero en manos de Manuel Chaves.
La última de las hipótesis que contempla el PSOE y, a juicio de algunos
dirigentes consultados, "la menos probable", es que los socialistas venzan por
menos de "seis o siete" escaños de diferencia con el PP. Este virtual empate
abocaría a Ferraz a tantear un pacto con el PP, pues interpretarían que los
ciudadanos desean un Gobierno presidido por un socialista, pero sin presencia
nacionalista. En este caso, quien se tambalearía sería el liderazgo de Zapatero,
aunque tampoco se descarta -pese a haber negado ambos líderes esa
posibilidad- que ensayara con Rajoy un pacto "a la alemana", donde existe un
ejecutivo presidido por la democristiana Angela Merkel con un vicepresidente y
ministro de Exteriores socialdemócrata, en este caso Frank-Walter Steinmeier. En
este escenario, los socialistas creen que "lo lógico" es que presida el gobierno
el partido con más escaños.