Por Ciudadano Ubú en el blog de “Ciudadano Ubú” el domingo 17 de mayo de 2009
Por su interés y relevancia he seleccionado el artículo que
sigue para incluirlo en este sitio web
Antonio
Robles, alias “ El Bambas”, y José Domingo, alias “Mudito” son dos personajes
curiosos de la izquierda catalana no nacionalista. Entre sus méritos se relatan
el liderazgo discreto, pero no conjunto, de una “legión de ocupas” que se han
ido infiltrando en todos los partidos políticos no nacionalistas,
fundamentalmente en Cataluña, pero también en Valencia, Andalucía, Madrid, y
otras comunidades autonómicas.
También
consta entre sus hazañas, haber ocupado el espacio y el tiempo de la lucha
contra el nacionalismo y la corrupción socialista en Cataluña, para que el
nacionalismo y el socialismo hayan avanzado como nunca antes lo habían hecho.
Si en Cataluña hay una secesión en ciernes, perfectamente organizada, en parte
es gracias a ellos, que siempre han templado, y en ocasiones, gaseado la
resistencia, con sus peroratas y siniestras acciones. Algún día el delirio
cuatribarrado les reconocerá lo que han hecho por Catalunya con algún busto en
la plaza de un pueblo del Baix Llobregat.
Si el
proyecto Ciudadanos ha fracasado, también ha sido gracias a sus manipulaciones
arteras, y todo lo que han urdido, para que no saliera adelante, y como
Ciudadano Ubú tiene la legitimidad de la historia, por haberse enfrentado a
Albert Rivera y sus ambiciones, más que ningún otro ciudadano, es hora de hacer
justicia.
Albert
Rivera, al menos, le ha echado cara al asunto y ha resistido como un jabato, el
acoso y la coacción permanente de este par de tarugos, le he criticado mucho y
no dejaré de hacerlo, pero siempre ha ido con todo el descaro, con su ambición
por delante, y a quienes le hemos conocido no nos ha engañado. Él, que llegó a
la política para triunfar, siempre ha considerado el partido como un
instrumento a su servicio, pero su mérito está en que siempre ha engañado a
diestro y siniestro, con el desparpajo de alguien que sólo cree en su verdad, y
lo seguirá haciendo hasta el último día de su existencia, no lo duden. Pero una
cosa tiene a su favor, sus apoyos siempre han sido diversos y plurales,
personalistas sí, pero no sectarios. Lo cortés no quita lo valiente, enemigo
Rivera.
La
historia de estos tipejos, Robles y Domingo, sin embargo, es una de las
infamias más deleznables de la historia política de nuestro maltratado país, no
sólo en Cataluña, sino en otras muchas comunidades, como Valencia, Aragón,
Madrid, Andalucía y Baleares.
Comenzaré
por Antonio Robles, más conocido como “el bambas” que tras el halo cuáquero de
quien desea el reconocimiento público por sus extraordinarios complejos,
incorporó a Ciudadanos uno de los lastres más perniciosos de su corta vida: el
sectarismo.
Los
planes de Robles siempre han sido hacerse con el Partido Ciudadanos por aclamación,
posiblemente para matizar desde fuera la deriva del PSC. Se incorporó a
Ciudadanos con un protopartido organizado: Iniciativa No Nacionalista, que fue
sembrando el cáncer sectario por toda su estructura, en una estrategia que
recuerda la toma del poder de los bolcheviques en Rusia.
Desde
la Secretaría General que ocupó por sorteo, fue creando un partido dentro del
partido, colocando a Miguel Salmerón en la Secretaría de Organización e
imponiendo en las coordinadoras a todos los de su cuerda, desde los socialistas
en positivo que hoy lideran UPyD con el conocimiento y a poyo de Rosa Díez,
hasta los militantes del PSC que habían perdido toda capacidad de trepar en el
partido de Montilla.
Al
traidor Robles, que jamás respetó el ideario original del partido y que fue el
que urdió con Carreras -y Domingo de intermediario- el cambio de ideario, que
produjo la salida de todos los liberales, radicales, no alineados y los
izquierdistas tardomarxistas de Alternativa Ciudadana Progresista, se debe que
el partido nunca haya levantado cabeza.
También
se debe a su intervención, el que Ciudadanos no se expandiera por el resto de
España, porque en su estrategia primero estaba controlar el poder en Cataluña,
y después, con el poder en sus manos, expandir el partido por todo el país,
hecho que se produjo en la Asamblea de Madrid, en la que se decidió
–previamente se había organizado con los sectarios infiltrados por la izquierda
del partido en la capital de España- que Madrid no se presentara a las
Elecciones Municipales. Rivera sólo hizo el discurso, pero Robles, por detrás,
tramó el control del partido, impidiendo que hubiera una candidatura madrileña,
que con seguridad habría sacado de Cataluña y fuera de su control el partido.
Juanjo Areta, Coordinador de Madrid, y Juan Francisco de la Torre, coordinador
del resto de España (Cataluña y el resto, fíjense en la precisión de los
conceptos), lo podrían explicar con más detalle, pero poco después presentaron
su dimisión, el primero mandándolos a la mierda, y el segundo, a punto de
presentar una denuncia por acoso contra el partido.
Pero el crimen más abyecto de este traidor al partido, fue el cometido en
Cerdanyola, cuando implantó una coordinadora paracaidista de advenedizos de su
cuerda, desplazando a la gente que había conseguido los mejores resultados
electorales de Cataluña, todo ello porque había posibilidades de obtener
concejales, gracias al trabajo y el prestigio personal de los que habían hecho
la campaña de las autonómicas, pero se encontraron con auténticos héroes
ciudadanos, que coordinados por Manuel I. Cabezas, les presentaron batalla,
incluso haciendo campaña contra el partido en su zona. En el memorial ciudadano
que pueden leer en este blog, los interesados podrán informarse de la mayor
infamia que se hizo en Ciudadanos, y que fue la puntilla, para que la rebelión
se produjera dentro del partido por parte de los que firmaron la Declaración de
la Dignidad, cuando al mismo tiempo, se impidió que en Sevilla se presentara
una candidatura, y Mario Acosta, su coordinador, abrió la corrupción del
partido a la luz de los medios de comunicación, siendo apoyado por su
coordinadora. Fue expedientado para ser expulsado del partido, junto a uno de
los compañeros más ilustres que hemos tenido, Antonio Casas Aragón, por haber
denunciado la felonía en el interior de los foros de comunicación entre
ciudadanos. 54 ilustres ciudadanos, firmaron la declaración de la dignidad, y
se personalizaron como autores de las palabras de su compañero ACA. De todo
esto hay suficiente información en este blog, para quien quiera consultar la
verdadera historia de Ciudadanos, contada por sus militantes no abducidos, que
mostraron a los que quisieron enterarse, la falta de respeto por las personas
que existía en el partido que decía defenderlas.
Robles,
que hoy se despepita por recalar en UPyD –donde los socialistas en positivo y
en negativo, han conseguido hacer lo que él no logró con ciudadanos y en esta
ocasión con el apoyo expreso de Rosa Díez y Gorriarán-, decidió en el último
momento no apoyar la candidatura de Bouza-Brey -que promovía una reunión
progresiva de Ciudadanos con UPyD-, y prefirió seguir con Rivera dentro del
partido, porque de esa forma podría integrarse con él de líder, lo que le
permitiría ocupar mejores posiciones en UPyD, mientras que si apoyaba a Luis
Bouza-Brey siempre sería uno más. Así que menos pública, más discreta, pero la
ambición personal de Robles ha sido tanta como la de Rivera, y entre ambos,
porque son los principales responsables, han conseguido destruir Ciudadanos, y
tomar el pelo a todos los que pensábamos que todos los militantes éramos
iguales, con el mismo respeto a la democracia y la libertad, en un partido que
se anunciaba diciendo: “sólo nos importan las personas”.
De
José Domingo, “mudito”, parece que hay poco que decir, porque su juego ha
estado siempre entre bambalinas, próximo a los planteamientos de Robles, pero
siempre ha tratado en convertirse en el salvador del partido, ante la
competición por el poder de sus compañeros parlamentarios. Apoyó a Rivera en el
Congreso del Hespérides abiertamente y había que ver la cara de felicidad y los
abrazos que se procuraban cuando salió reelegido.
Domingo
ha jugado sus bazas, dejando que Robles se desgaste y se queme, para más tarde
ofrecerse como su sustituto, en el liderazgo de la izquierda no nacionalista.
En realidad, tampoco ha hecho mucho por la lucha contra el nacionalismo, porque
lo que siempre ha deseado es ser admitido y reconocido en el grupo de notables
de la izquierda como su portavoz, y un posible líder de futuro.
Ha
sido el enlace necesario, entre la gente de Robles y Rivera, para que Albert
saliera elegido presidente, y el partido cambiara de ideario en el II Congreso.
Pero además quiso vender sus favores, por medio de su amigo Angel ,el
economista y algunos más, a la candidatura de Luis Bouza-Brey, por si salía
elegida. Domingo es un tahúr que siempre ha jugado con las cartas marcadas y a
todos los bandos. De los tres, es el menos recomendable, y en el que menos se puede
confiar, porque siempre ha jugado a engañar a todo el mundo, a los
"suyos" si alguno lo ha sido, y a los demás. Un auténtico Fouché de
la política catalana, pero con menos talento y fortuna que el duque de Otranto.
Su
última jugada ha sido quedarse en Ciudadanos, para heredar a Rivera, si la
coalición que ha organizado con Libertas se acaba estrellando en las próximas
Elecciones Europeas, y el niño decide irse con Libertas, para ocupar algún
cargo dentro del partido paneuropeo, que ya le han ofrecido. A última hora,
viendo que la cosa está difícil, ha decidido dar el golpe y salir a la luz,
arrebatándole a Rivera la presidencia del grupo mixto del Parlamento Catalán,
para defender el no nacionalismo hasta las próximas elecciones y hacerse un
hueco en el partido de Rosa Díez, porque aspira, si no llega alguna figura
estelar que se lo impida, a liderar UPyD en Cataluña, tema que posiblemente
esté tratando en estos momentos con Carlos Martínez Gorriarán, con la mediación
de Teresa Giménez Barbat y el grupo de notables izquierdistas, entre los que se
cuenta el profesor De Carreras –del que ha sido el valido desde el comienzo de
Ciudadanos-
Esta
crónica se la dedico a Arcadi Espada, porque gracias a él, que no se ha
enterado de la mitad de lo que estaba ocurriendo o bien se las han colado como
al Madrid, las cosas no han podido ser de otra forma; siempre ha estado ahí, de
florero, metiendo la gamba, y sin lograr que el partido tomara un curso
natural, en democracia y libertad, que al parecer era lo que pretendía, pero ha
sido incapaz de conseguir.
Ahora
sólo falta que el Padre Boadella rece una oración laica, en castellano, por
supuesto, por el finado Ciudadanos, y podremos dedicarnos a otra cosa, que ya
va siendo hora. Ves, Maestro Boadella, como aquellos a los que dijiste en su
día que tenían más moral que el alcoyano, han logrado tras el paso del tiempo
lo que parecía imposible, empujar a Ciudadanos hacia su final, para poder
escribir el epílogo miserable de tu obra más absurda, y librarte del hijo
descarriado que concebiste. El mérito no es mío, sino de los auténticos
Ciudadanos, tus leales zanahorios, los que heredaron legítimamente el Espíritu del
Tívoli y tus sueños de libertad para Cataluña, por los que velamos cada día; a
nadie mantuvimos lealtad más que a Ciudadanos (y a ti), aquí queda esta crónica
para la historia y ahora ya le puedes dar a Esculapio ese gallo que le habíamos
prometido. La verdad siempre acaba triunfando, cuando hay alguien que no se
rinde ante los sinvergüenzas organizados.
¿Verdad
Maestro Boadella?, lo aprendimos de ti, nosotros sí lo aprendimos, tu lucha y
tu esfuerzo no fueron baldíos, deberías sentirte orgulloso en tu exilio
madrileño.
Ciudadano Ubú,
uno más de los uno más de toda la vida.
Publicado por Ciudadano Ubú en 3:04