BUSH SE EQUIVOCÓ AL ATACAR IRAK PORQUE EL PROBLEMA ES SIRIA
Reportaje de “El Semanal Digital” del 14.07.06
Por su interés y relevancia he seleccionado el reportaje que sigue para incluirlo en este sitio web.
El formateado es mío (L. B.-B.)
La crisis creada por
el secuestro de Hezbolá se transformó esta noche en el estallido formal de una
guerra que se extiende ya hacia Siria al cortarse la carretera de Beirut a
Damasco.
14 de julio de 2006. La evolución de los acontecimientos es seguida desde
Jerusalén como la prueba de que George W. Bush erró al golpear a un Sadam Husein
acorralado por la ONU porque es Siria quien maneja los hilos de destruir
cualquier proceso de paz.
El presidente de Irán amenaza
Mientras se extiende el miedo a que estalle
definitivamente la guerra en Oriente Medio, el presidente de Irán Ahmadineyad
amenazó en la televisión de su país "si Israel comete otra tontería y
ataca Siria, eso supondría un ataque a todo el mundo islámico y tendrá como
consecuencia una dura respuesta".
Durante la noche, Israel bombardeó carreteras, pasos elevados y tanques de
combustible en Líbano, causando aún más devastación en la economía de su vecino
como represalia por el secuestro de dos soldados israelíes por la guerrilla de
Hezbolá.
Alerta a la población
Aviones militares israelíes también bombardearon una base de guerrillas
palestinas pro-sirias en las afueras de la capital libanesa. Antes de los
ataques, los israelíes avisan a la población mediante pasquines en los que se
les advierte del peligro de acercarse a los lugares de reunión y oficinas de
Hezbolá.
Tras el bloqueo marítimo del jueves, cazas israelíes bombardearon al amanecer la
principal autopista Beirut-Damasco, endureciendo el bloqueo del país, y llegando
hasta algunos barrios de las afueras de la capital siria. Tambíen se han atacado
objetivos en barrios musulmanes chiíes de Beirut, muriendo al menos tres
personas.
Hezbolá lanza una lluvia de cohetes
El número de libaneses muertos desde que Israel empezó a vengar el ataque
fronterizo de Hezbolá del miércoles en el que dos soldados israelíes fueron
capturados se eleva ya a 60.
Hezbolá, que quiere intercambiar a sus rehenes por prisioneros detenidos en
Israel, ha lanzado una lluvia de cohetes al otro lado de la frontera, matando a
dos civiles israelíes e hiriendo a otros 95, en los peores incidentes de
violencia desde que tropas israelíes abandonaran Líbano hace seis años.
Israel acusa a Siria e Irán
Israel hace responsable a Líbano de las acciones de Hezbolá, un grupo islamista
respaldado por Siria e Irán que tiene representantes en el Parlamento y en el
Gobierno. El frágil Gobierno de Beirut, demasiado dividido como para desarmar a
la facción chií que controla de facto el sur de Líbano, ha instado al Consejo de
Seguridad de la ONU a detener el embate israelí.
Sin embargo, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, y el ministro de Defensa
Amir Peretz optaron el jueves por la noche por aumentar sus operaciones de
castigo. "Se tomó la decisión de intensificar las operaciones de Israel en
Líbano", dijo la radio del Ejército Israelí citando a fuentes políticas.
Ataque sin precedentes contra Haifa
La decisión se tomó tras dos ataques con misiles sin precedentes contra el
puerto de Haifa, de los que Israel acusó a Hezbolá, que negó haber disparado
contra la ciudad, situada a 30 kilómetros de la frontera libanesa. Israel
denunció que estos misiles de medio alcance llegaron al sur del Líbano desde
Irán.
La tensa situación de la zona será discutida durante la reunión de este fin de
semana en San Petersburgo. El jueves, Condoleezza Rice hizo un llamamiento a
Siria para que "actúe con responsabilidad" y añadió que "también Israel debe
evitar causar víctimas entre la población civil".